Crisis económica
ver másClaudio Zuchovicki
Más allá de la codicia y el miedo
Más allá de la codicia y el miedo, es el título de un libro de Hersh Shefrin que describe el proceso en la toma de decisiones de un inversor. Este nos ayuda a comprender como los mercados se debaten entre el miedo y la codicia, entre el pánico o la avaricia.
Parto del principio que los mercados no se mueven por lo que pasa, sino por las expectativas previas que los inversores tenían de lo que podía pasar. Si se desilusionan con un balance, con un numero de empleo o fiscal o con un resultado político, las bajas son mucho más grandes e irracionales que lo que indican los propios fundamentos y viceversa si los datos son favorables ante una grata sorpresa. En concreto si una empresa presenta un balance donde gana 10% menos de lo que pensaba ganar, la acción puede caer 30% o si ganan un 10% más de lo que se pensaba puede subir un 30%.
Saben porque, porque el mercado negocia confianza y expectativas. Cuando perdes alguna de ellas no hay discurso, anuncio o promesa que puede restituirla de golpe.
Opinión
ver másSantiago Bulat
¡Terminemos con la timba financiera! ¿Por qué esta afirmación es errónea?
1- Lo que oímos. "El mercado de capitales representa la timba financiera". "Necesitamos cambiar la ganancia fácil de la timba financiera". "Hay que pasar de un modelo financiero a uno productivo". Son frases que se han escuchado recurrentemente en las campañas políticas y desde diversos sectores durante varios años. Ya que nosotros somos el electorado y estamos en pleno período de decisiones, vale la pena preguntarnos si estas afirmaciones son o no ciertas. 2- Definición. Según su definición formal, la palabra "timba" es una partida de juego de azar, e improbablemente la suerte va de la mano de las finanzas. A modo de ejemplo: si en la ruleta todos los participantes eligen apostar al color rojo y un solo participante al color negro, la influencia que tienen sus decisiones sobre el resultado del juego será nula. En las finanzas, si hay mayor demanda por determinado activo y todos deciden comprarlo, habrá un efecto directo sobre el precio. A partir ...
Opinión
ver másLa fuerza de las Pymes argentinas
Las Pymes son las grandes generadoras de empleo y recaudación impositiva en cualquier sociedad. Por ello, todos los países toman medidas para que los emprendimientos que surgen en sus territorios germinen sin sobresaltos, prosperen y sean sustentables, para que puedan cumplir el irremplazable rol que les cabe en el desarrollo y la creación de riqueza.
Análisis Semanal
ver másPor qué el bono para los estatales es mayor que el de los trabajadores privados
El Gobierno oficializó los pagos de $5.000 en el primer caso y de $4.000 en el segundo. Las causas de la diferencia
Análisis Semanal
ver másAmilcar Collante
Brotes secos ¿hasta cuándo?
Hay varias cuestiones que explican a la recesión que atraviesa el país. A la “mala praxis” del equipo económico, que mantuvo desequilibrios macroeconómicos (sin reducirlos), y agudizó el problema del déficit de la cuenta corriente, se sumó a la sequía en 2018. Esta se reflejó en el último EMAE-Indec (Junio) con una caída de 31% interanual de la actividad en el sector agrícola. Y tuvo una retroalimentación negativa, ya que la escasez de divisas impactó en el plano cambiario. Por si esto fuera poco, desde fines de Abril estamos en un evento de balanza de pagos y aún no se ha podido estabilizar el tipo de cambio. La turbulencia en Turquía y ahora en Brasil nos lleva a un continuo de devaluación-inflación-recesión. Al comienzo de la historia el dólar estaba en $20 .Hoy cotiza $31,5 (mayorista). La caída sistemática de reservas internacionales, solo “emparchada” transitoriamente por el crédito del FMI y hoy sigue drenando .Y la tasa de interés siguió elevada por más de 4 meses. Ninguna de estas 3 cuestiones (devaluación, pérdida de reservas y tasas de interés altas) se han revertido o frenado. Lo que muestra que la situación no está resuelta .Y menos, creer que está bajo control.
Este contexto hace que estemos en recalculo permanente de lo que vendrá. ¿Cómo afecta a la economía real esta situación?
Opinión
ver másEl Plan C de Melconian
El economista y otrora referente del macrismo no ahorró críticas al Gobierno. Sostuvo que todo podría terminar con una economía intervenida. La Morenización
Análisis Semanal
ver másEntró la sequía, pero el rompecabezas aún tiene muchas piezas para colocar
La economía está transitando el 3° trimestre, período que hasta ahora presenta una recesión industrial y un consumo estancado o en caída. Las perspectivas para el período no son buenas, en parte porque la última foto que tenemos de la actividad económica es bastante mala: el EMAE dio para mayo un retroceso anual de 5,8%. Nadie se mostró sorprendido por la contundencia del número, porque recoge con toda brutalidad el impacto de la sequía: el agro tuvo un desplome de 35 por ciento.
Especial de la Semana
ver másSergio Sinay
¿Y si la economía no fuera todo?
“La única función de la predicción económica es hacer que la astrología parezca algo más respetable.” Aunque no lo parezca, esta idea fue expresada por un economista. Y no por cualquiera, sino por el canadiense John Kenneth Galbraith (1908-2006), uno de los más prestigiosos e influyentes del último siglo. Autor de obras de consulta permanente, como “La sociedad opulenta” o “El nuevo estado industrial”, Galbraith fue un hombre comprometido políticamente, muy cercano al partido Demócrata en Estados Unidos, y desconfiaba del poder omnímodo de los mercados así como del poder financiero que, carente de bases materiales concretas y de rostros que se puedan ver y registrar, termina por operar desde las sombras para determinar el destino de personas, sociedades y países. Como dándole la razón a Galbraith es posible encontrar astrólogos que desarrollan su pensamiento con certezas y fundamentos más claros y cimentados que muchos economistas. Pruebas al canto, las obras de la psicoterapeuta junguiana británica Liz Greene, del fallecido Howard Sasportas, de Alexander Ruperti o de Bill Tierney. Al revés de tantos émulos de Casandra que deambulan por los pasillos de la economía, aquellos autores astrológicos no se proponen vaticinar el futuro, sino entender de qué modo y por qué razones las complejas energías que constituyen a una persona podrían desarrollarse o abortarse en el tiempo. Aun así, prevalece un respeto por los oráculos económicos que no siempre se otorga a los astrológicos. Personas que no entienden de ninguna de las dos disciplinas suelen creer en la predicción ...
Opinión
ver másGermán Fermo
La Argentina que se viene: entre la mediocridad y la incertidumbre
Otra oportunidad perdida. El 2016 era el año para implementar una serie de reformas estructurales que permitieran a nuestra querida nación liberarse del estado de permanente asfixia que soporta el entorno económico desde hace décadas, un estrangulamiento que nos impide crecer, lo cual es un aspecto esencial para la eliminación de la pobreza estructural que padece nuestro país. Lamentablemente para el futuro de la próxima generación tres aspectos contribuyeron a que esto no ocurriese. Primero, un oficialismo que no se atrevió a imponer una agenda de transformación relevante y que prefirió generar en la población la sensación de que no estábamos tan mal: la fe y la esperanza se comieron dos años y medio de gestión. Segundo, una oposición destructiva en cuanta iniciativa de cambio que intentó proponer el gobierno siendo la corrección tarifaria quizá, el ejemplo más elocuente. Tercero y lo mas importante, una sociedad que democrática y mayoritariamente votó por un cambio pero que al percibir los costos que el mismo implicaba decidió desentenderse y renunciar al mismo, no estando a la altura de semejante desafío histórico. Mucho se habla de la herencia K, lo cual es cierto, el estado de la economía argentina en 2015 era sumamente comprometido. Pero poco se habla del formidable stock de confianza con el que este gobierno comenzó su gestión en 2016. Uno de los costos mas elocuentes del gradualismo oficialista fue la destrucción de gran parte de ese stock inicial con el riesgo país subiendo muy drásticamente desde sus mínimos en octubre 2017, aspecto que se ...
Opinión
ver másEn febrero comienzan a operar los vuelos low cost en el aeropuerto de El Palomar
Es una de las grandes apuestas de la Casa Rosada y busca descomprimir la cantidad de vuelos en Ezeiza y Aeroparque.
Análisis Semanal
ver másLa paradoja del optimismo en el mercado laboral
Tras cuatro años de estancamiento en los cuales no se han generado nuevos empleos en el sector privado, los datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) realizada por el INDEC muestran que el empleo se está recuperando.
Análisis Semanal
ver másNicolás Salvatore
Toda crisis es un sistema de reparto de pérdidas
La política económica está siendo objeto de severas críticas: alta inflación, recesión y desempleo. Es, a mi entender, una crítica miope. De memoria corta. Ante todo, es oportuno recordar que la actual recesión (y el desempleo asociado), se originó hace 3 (tres) trimestres, no (1) uno, con la anterior administración. Sugiero revisar los trabajos de Ariel Coremberg al respeto. Y el régimen de alta inflación tampoco tiene 1 (un) trimestre, sino 8 (ocho) años. En consecuencia, podría acusarse al gobierno de no haber podido mitigar esta estanflación en 90 (noventa) días, pero nunca de ser responsable de su creación. ¿Por qué el gobierno no fue eficaz, hasta ahora, en comenzar a corregir estos desequilibrios? Más aún, en el corto plazo los ha profundizado. En realidad, sí los ha empezado a corregir, sólo que la salida de una crisis macroeconómica de la magnitud y complejidad de la actual requiere tiempo, y medidas impopulares.
Opinión
ver másGermán Fermo
La Argentina del choripán merece un sueño utópico
Ser keynesiano no implica ser ineficiente en el manejo del gasto público. En todo este tiempo electoral cuestiono el énfasis que se suele poner en la preservación de Fútbol para Todos y otros subsidios improductivos relacionados. Veámoslo de una forma cruel y ácida: cada hora de FpT representa “x” libros menos que se leen...
Opinión
ver másGrecia 2015 y Argentina 2001
La situación de Grecia es crítica. Está sufriendo una depresión económica, acumula una caída del PBI de 25% desde el año 2009. El desempleo se sitúa en el 25%. La deuda pública roza 180% del PBI, una cifra alarmante. Semejanzas y diferencias con nuestra crisis
Análisis Semanal